“…A veces, nada mejor que un plato nos puede hacer de guía en el misterioso laberinto de Sicilia. Hoy disfrutamos de la vid, los olivos, las naranjas y los limones, y los consideramos como como algo que ha estado siempre en nuestro paisaje agrario… En realidad, lo que vemos es un producto de la historia de la isla”.
Las antiguas tradiciones culinarias, ricas de los olores y del sol de Sicilia, encierran los secretos de esta espléndida tierra dominada por los distintos pueblos que han contribuido a enriquecer la cocina siciliana a través de mil matices.
La siciliana es una civilización única que ha conservado intactas en el tiempo las propias características. Los múltiples aspectos de esta civilización encuentran su mejor expresión en el arte culinario. La mesa se convierte en un escenario de fantasía, expresando la creatividad y la elegancia intacta de este pueblo, resultado del riquísimo patrimonio cultural de la isla.
El “banquete” se celebra aquí quizá mejor que en cualquier otro sitio del mundo. Las salsas agridulces, la cassata, las verduras, las carnes presentadas de mil maneras. Por no hablar de los muchos matices de todos esos sabores que se inspiran en el mundo oriental y español, y que contienen en sí reclamos de mitos, leyendas, belleza y poesía.
A la policromía festiva de cada plato ha contribuido la belleza de la Naturaleza con sus volcanes, el sol, el mar, las grandes extensiones de terrenos fértiles. Desde la isla se han extendido por todo el mundo el mazapán, los pistachos, las almendras, los piñones… sigue leyendo en el Blog de Babilinia.